Ellos – Cuento

Sin que se de cuenta la noche ya esta en todo el cielo. Entra, cierra la puerta y en el mismo movimiento enciende la luz. Ella arroja ropa desde el ropero hacia la maleta que, como un pozo sin fondo, esta abierta en medio de su cama. Él se quita la corbata y lo hace volar sin detenerse a averiguar donde caerá. Va hacia el pequeño kitchenette, toma una botella de jugo, cierra, la luz se apaga, y con la botella en la mano camina hacia la ventana.

Ella se sentó sobre la maleta, una media y dos mangas su polera intentaron salir más no pudieron. Levantó las llaves que dejo en la mesa junto a la puerta y mientras metía todos los papeles que podía en su cartera caminó hasta la puerta. Él se paró frente a la ventana. Las luces del cartel del centro comercial de enfrente le iluminaron la cara: amarillo, rojo, azul y rojo. Ella abrió la puerta y salió al pasillo  y de un movimiento propio de una mujer con carácter se acomodó el cabello y pulsó el botón del ascensor.

Él, sin ser él, ahora está acostado mirando el techo. El frió propio de las noches húmedas de invierno de la ciudad lo obligaron a ocultarse bajo sabanas, colchas y edredón. ¿Por qué le habré dicho que estaba bien?, hacia tantos años que no la veía y cuando me preguntó cómo andaba, yo le dije: “bien”. Si ella supiera que mi vida fue una basura desde que la vi por última vez. Si supiera que estuve pensando en ella más de lo que debe pensar ella en si misma. Bien, le dije. Que ni los triunfos me supieron a gloria sin poder compartirlos con ella, que si supiera que mil veces pensé en terminar con todo para dejar de sentir que me faltaba, y hoy, nos cruza el destino y yo le digo bien. Maldita sea… todo. Bien… eso le dije. No hubo mucho tiempo de más.

Ella, sin ser ella, espera en la sala de embarque cuatro el avión que la regresará donde ella cree que pertenece. Se mira las manos,  su solitario anillo en el dedo medio, sus piernas, las puntas de los pies. Mi vida es lo suficientemente complicada siquiera para entender que esta pasando, tengo la ilusión de que el tiempo parara y vivir estas ultimas horas por siempre, y que él me  abrazara eternamente en las escaleras eléctricas… se le veía bien, guapo… ¿como me vería a mi?. Mañana debo ir a la peluquería sin falta. ¿Ya saldrá el avión?

Él, el original él, acaba de terminar su copa de vino blanco en un carcajada de risa limpiándose con una servilleta la boca. Día duro, un cigarrillo, un café, una torpeza. BAH! Ahora toca el encuentro, un buen vino, las tapas, las risas, la cama de un hotel, sus ojos, su voz. ¿Esto es solo ilusión?

Ella, la original ella, duerme. Duerme plácidamente. No quiero que acabe el día, fue lo último que pensó en estado consciente antes de entrar en la profundidad del sueño abrazada cara a cara de él. Vi un cuadro hermoso en la penumbra de la noche, La estela fina de un humo claro que dejo las velas apagadas  se eleva en espiral por los rincones de la habitación, la luz blanca de la luna, la ventana, los grises, los tonos azules, sus ojos cerrados, su suave piel y sus cabellos… apretó fuerte los ojos y dijo «no quiero que acabe el día».

Él, esta frente al espejo del baño tratando de reconocerse. Ella cierra la puerta del ascensor. Él, sin ser él, expulsa las sábanas, las colchas, los edredones de dos o tres violentas patadas. Ella, sin ser ella, se pone de pié y detiene la mirada donde la pista del avión pierde forma y se mezcla con la nada. Él, el original él, prende un cigarrillo en silencio mientras sus ojos se siguen riendo. Ella, la original ella, duerme; duerme con la armonía propia del humo que se va en espiral.

 

  1 Comentario

  1. Miguel Angel Vásquez Rodríguez   •  

    Qué buen cuento!! me gustó mucho, tiene toda la escencia del cuento corto. Ideas rápidas, conceptos muy claros sin llegar a contar todos los detalles dejando lo suficiente para la cosecha del lector. Muy bien hecho, algunas frases geniales!!! Muy buen trabajo!!

    Adelante Claudio!! felicitaciones.

    PD: Tienes que resolver tu problema con las tildes de la agudas y las llanas que parece agudas.. es un reto.

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